
Mujeres que aman las plantas son más felices y tranquilas, según la ciencia
Sin lugar a dudas, la jardinería y el amor por las plantas forman parte de una terapia que día a día nos relaja y nos trae una paz inexplicable, que, ahora la ciencia explica a detalle

Mujeres que aman las plantas son más felices y tranquilas, según la ciencia. | FOTO: PEXELS
Definitivamente, las mujeres (y algunos hombres) llegamos a cierta edad en la que la nuestro jardín se convierte en parte de nuestras prioridades, pues comenzamos a apreciar sus beneficios, no solo con su belleza que adornan y le dan vida a un hogar, sino también con la felicidad que causa plantarlas, cuidarlas y regarlas a diario. De hecho, las mujeres que aman las plantas son más felices, y según la ciencia, estos son los poderosos motivos.
Las mujeres que aman a sus plantas no nos dejarán mentir, pues la jardinería podría ser nuestro momento relax del día, ya que es una actividad bastante placentera, relajante y terapéutica que nos trae paz y tranquilidad, al mismo tiempo que nos hace felices. De acuerdo a un estudio, estos son los motivos.
Nos hacemos más responsables
Cuidar plantas no solo no da paz y tranquilidad y adorna nuestro hogar, sino también nos hace más responsables, ya que es una buena forma de hacernos cargo y cuidar de otros seres vivos, por lo que es una excelente actividad para inculcar a los niños desde pequeños.
No importa si eres hombre o mujer, todos podemos ser jardineros
La jardinería no es una actividad exclusiva de mujeres, de hecho, hay hombres que también se apasionan por su jardín, y cuidan como nadie a sus plantas, árboles y flores. De igual manera, muchos hombres se dedican a la horticultura, e incluso, algunas personas con problemas de salud mental o toman como terapia para aumentar la autoestima.
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Creamos conexión con otros seres vivos
La jardinería también nos brinda la valiosa oportunidad de darnos cuenta que no somos los únicos seres vivos en el planeta, y que hay otros que necesitan de nuestros cuidados. Al mismo tiempo, al ser una actividad al aire libre, ayuda a prevenir o tratar la depresión, pues nos ayuda a sentirnos menos aislados.
De hecho, un estudio arrojó que las personas que se encuentran en unidades de salud mental o en la prisión pueden verse beneficiados con la jardinería grupal, que sirve como terapia, ya que centra las habilidades y aspiraciones colectivas más que en los síntomas individuales.
Terapia relajante
Cuidar plantas y asegurarnos que crezcan adecuadamente, nos aporta una gran paz y tranquilidad, que nos relaja en nuestro día a día, por más estrés que hayamos tenido. De hecho, para Freud, la jardinería “nos permite escapar de otras personas. Las flores son tranquilas a simple vista. No tienen emociones, ni conflictos”.
Por si fuera poco, algunas actividades que se realizan en la jardinería, tales como arrancar la hierba, podar, sembrar y barrer, entre otras, ayuda a que los pensamientos fluyan junto con nuestros movimientos.
Trabajar en contacto con la naturaleza libera hormonas
Otro de los grandes beneficios de la jardinería es que libera hormonas felices, y nos hace un recordatorio para hacer ejercicio y pasar tiempo en contacto con la naturaleza, pues nos dice que lo que es bueno para el cuerpo, también lo es para la mente.
Cuando esto sucesde, se incrementan los niveles de serotonina y dopamina (las hormonas que nos hacen sentir bien), sin encionar que también elevan el nivel del cortisol, reduciendo el estrés.
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Nos recuerda lo importante que es el presente
Las personas que aman la jardinería se vuelven más felices, pues nos recuerdan lo importante que es vivir el momento presente, sin pensar en ataduras del pasado y preocuparnos por un futuro.
“Cuando dejamos de pensar en el pasado o de preocuparnos por el futuro y, en cambio, nos centramos en el aquí y ahora, la ansiedad dismiuye”. Asimismo, sube el ánimo al utilizar los sentidos escuchar, tocar, oler y ver, simplemente nos sentimos mejor.
Es un recordatorio del ciclo de la vida
Sin duda, ver nacer, crecer e irse a una planta, es un claro recordatorio que hay algo seguro en esta vida: la mu3rte. El ciclo de la vida es un hecho, y con la jardinería nos damos la oportunidad de aceptarlo. Esto, en algunos casos, puede ayudarnos a superar el dolor, pues es una forma en la que podemos dar vida, y reconocer su fin, como un símbolo de regeneración.
Ayuda a desahogar la ira
Por otro lado, la jardinería también puede utilizarse como una efectiva y relajante terapia para desahogar la ira y la agresión. Con ella desprendemos el enojo que podemos contener cortando, picando, atando y tirando, relajándonos además sembrando, regando, alimentando, y admirando su belleza.
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